El Santiago Bernabéu volvía a brillar en Europa en la tercera jornada de la Champions, la Juve que tuvo que encerrarse atrás para defender el asedio blanco, era su rival. Jude Bellingham venció al muro bianconero en el minuto 57' tras el tiro de Vinicius que se estrellaba en la madera.
La Juventus llegaba al parido con varias bajas importantes con un once para salir a resistir el vendaval blanco, mientras que el Real Madrid salía con su once de gala. El conjunto merengue quería buscar su tercera victoria consecutiva para hacer pleno hasta el momento, por el contrario, los italianos quieren aparcar esa mala racha de empates en la champions y digerir la dura derrota ante el Como en la Serie A por dos goles a cero.
A lo largo de la historia de la Champions, los duelos entre Real Madrid y Juventus siempre han estado cargados de emoción y rivalidad. Desde finales memorables hasta eliminatorias dramáticas, ambos clubes han forjado un clásico europeo que nunca defrauda. Este nuevo capítulo en el Santiago Bernabéu volvió a demostrar por qué este enfrentamiento es considerado uno de los más grandes del continente.
El conjunto dirigido por Xabi Alonso, fue le claro dominador del partido, teneindo la posesión del balón y generando siempre peligro en el área italiana que estuvo durante todo el partido bien defendida por la gran actuación de su portero, Di Gregorio. El guardameta italiano fue el MVP de los de Turín con paradas muy decisivas ara evitar una goleada del Real Madrid.
Los italianos, pese a estar encerrados en su campo también lograron acercarse al área de Courtois, pero el belga demostró su gran capacidad para evitar todos los disparos peligrosos de los atacantes bianconeros. En el plano táctico, el Real Madrid apostó por un bloque alto y presión constante, obligando a la Juventus a replegarse en su propio campo. Xabi Alonso planteó un esquema ofensivo con laterales muy proyectados, mientras que la Juve buscó sorprender al contragolpe con la velocidad de Yildiz y la potencia de Vlahovic. Sin embargo, la falta de precisión en los metros finales impidió que los italianos pudieran concretar sus pocas llegadas.
El partido dejó también una jugada bastante polémica, ocurrió en la segunda parte cuando Brahim Díaz, jugador del Real Madrid hacía una entrada bastante dura sobre el jugador francés de la Juve a la altura de su tobillo, que ni el árbitro principal, a centrimetros de la jugada, ni la sala VAR se percataron de la jugada. El colegiado solo mostró la cartulina amarilla al jugador marroquí, una jugada que si llega a ser revisada y cambiada por tarjeta roja, hubiera cambiado la dinámica del encuentro, ya que la jugada fue en el minuto 61' solo tres minutos después del gol de Bellingham.
Más allá del resultado, el triunfo refuerza la confianza del Real Madrid en su proyecto europeo y consolida a Bellingham como la gran figura del equipo en este inicio de temporada. Para la Juventus, la derrota supone un golpe anímico, aunque todavía mantiene opciones de clasificación si logra reaccionar en los próximos compromisos. El choque dejó claro que, pese a las diferencias actuales, ambos equipos siguen siendo referentes históricos de la Champions.
El partido finalizó con la victoria del Real Madrid que asegura de nuevo los tres puntos con un pleno de victorias hasta el momento en la competición europea. El club dirigido por el vasco, Xabi Alonso, se va solo marcando un gol y dejando alguna falta de eficacia de cara al clásico que se disputará este próximo domingo a las 16:15 horas en el Santiago Bernabéu.
